Franco Kraiselburd, CEO y cofundador de Asclepii, junto al doctor Miguel Fuentes, visitó las Facultades de Ciencias y Farmacia de la Universidad de Valparaíso, destacando el potencial de colaboración para impulsar terapias innovadoras y accesibles.
Publicado en Universidad de Valparaíso el 11 de Octubre de 2024
La Universidad de Valparaíso recibió al ingeniero biomédico y CEO de Asclepii, Franco Kraiselburd, quien conoció las capacidades científicas de las facultades de Ciencias y Farmacia. Durante su recorrido, resaltó la calidad de la investigación en la UV y las oportunidades de colaboración para desarrollar terapias médicas accesibles y revolucionarias.
Kraiselburd, ingeniero biomédico de la Case Western Reserve University de Ohio, Estados Unidos, es CEO y cofundador de Asclepii junto al doctor Miguel Fuentes, formado en la Universidad de Valparaíso. Esta empresa estadounidense ha transformado terapias regenerativas de alto costo en soluciones accesibles.
La visita, organizada en el marco del seminario Tech Horizon de Corfo y la Red de Gestores Tecnológicos de la Región de Valparaíso, permitió a Kraiselburd conocer el trabajo innovador de los investigadores de la UV en diversas líneas, desde la molécula hasta la investigación aplicada.
El recorrido fue guiado por destacados académicos de la UV, tales como el doctor Agustín Martínez, investigador del Centro Interdisciplinario de Neurociencias de la Universidad de Valparaíso (CINV-UV), quien destacó el apoyo que Kraiselburd y su empresa han brindado a proyectos como “Panexpatch”, un parche destinado a aliviar el dolor y a mejorar la cicatrización de heridas crónicas: “Franco ha sido un gran aporte para que podamos presentar nuestros proyectos en Chile, en función de su experiencia en biotecnología y desarrollo de terapias innovadoras”, comentó Martínez.
Kraiselburd explicó que “traemos una perspectiva más comercial y traslacional para aplicar tecnologías innovadoras. En Asclepii uno de nuestros cofundadores, el doctor Miguel Fuentes, se formó en la Universidad de Valparaíso, donde trabajó junto al doctor Agustín Martínez, investigador de la Facultad de Ciencias, y la doctora Caroline Weinstein y el doctor Ricardo Ceriani, ambos investigadores de la Facultad de Farmacia. Ya en Estados Unidos colaboramos en el laboratorio de Arnold Kaplan, pionero en medicina regenerativa. A partir de esa experiencia, desarrollamos una tecnología capaz de reducir el costo de una terapia regenerativa, basada en células o plasma”.
Expresando su admiración por las capacidades científicas y tecnológicas de la Universidad de Valparaíso, Kraiselburd afirmó: “Estoy impresionado por el nivel de investigación y la infraestructura que he visto aquí. Los investigadores de la UV están realizando un trabajo de altísima calidad, comparable al de las grandes ligas de la ciencia internacional”.
Durante su visita, Kraiselburd compartió su trayectoria como emprendedor, destacando que Asclepii ha reducido el costo de terapias regenerativas de 30 mil dólares a tan solo 300 dólares, una innovación que está revolucionando el acceso a tratamientos de medicina regenerativa. “Lo que falta en la región es ‘creerse el cuento’. La ciencia que se realiza en la UV tiene un gran potencial, pero es necesario fomentar una mentalidad emprendedora para llevar estas innovaciones al mercado”, señaló.
Kraiselburd también subrayó la importancia de generar alianzas entre la academia y el sector privado, especialmente con start-ups y empresas medianas, para fortalecer el ecosistema de emprendimiento en la región. “Formar colaboraciones es clave para acceder a nuevas formas de financiamiento y llevar la ciencia más allá del laboratorio”, agregó.
La doctora Caroline Weinstein, investigadora de la Escuela de Química y Farmacia de la UV, destacó la relevancia de la visita y el impacto potencial en los proyectos científicos de la Universidad: “Franco ha sido un apoyo importante en múltiples postulaciones a proyectos Fondef. Su visita abre la puerta a una colaboración más formal con Asclepii, lo que sería un gran incentivo para continuar desarrollando investigaciones de alto impacto internacional”.
La jornada concluyó con un mensaje de Kraiselburd: “Si yo lo pude hacer, ustedes también pueden. Aquí hay ciencia de primer nivel, y lo único que falta es confiar en el potencial que tienen. Las alianzas con empresas y start-ups son el camino para transformar esta investigación en soluciones reales para la sociedad”.
